Solo pensamientos, historias por escribir para que luego no las olvide. O solo para sacarlas de la cabeza...

domingo, 16 de marzo de 2008

Paz sin fronteras

Paz sin fronteras.

Estoy viendo el concierto que se esta haciendo en la frontera. A mi mamá al lado mio le salen lagrimas. Cuantos Tvs estaran prendidos en este momento viendo esta cosa loca, en la frontera?
En mi ventana hace un dia precioso, por alla en el puente simon bolivar debe haber una energia loca... que habra sido estar por alla? Cuales son los alcances de un evento como este? ya cantaron casi todos los artistas, esta a punto de terminar, por supuesto con Juanes, que como dijo Bosé que cojones tio!

Logra creer uno en la paz.. no hace daño de vez en cuando.

sábado, 15 de marzo de 2008

Una nueva calle

Creo que llega el momento de una nueva calle por cruzar.

Ojala sea pronto, y el camino largo.

jueves, 13 de marzo de 2008

Sobre separaciones y acercamientos

Hay cosas sobre las que uno tiene que escribir.

"Todas las cosas siempre tiene fecha de vencimiento... ¿será que si los recuerdos pudieran enlatarse, también tendrían una?"


Hay calles que uno tiene que cruzar, viajes que iniciar, puertas que cerrar, y otros caminos que tomar. A veces unas cosas toman mas tiempo que otras, a veces nos encontramos que una puerta se cierra, y buscamos desesperadamente como volver a abrirla… es que simplemente las puertas, a veces no se vuelven a abrir, las llaves se pierden en el camino y no hay forma de volver a atrás. Hay desiciones que uno tiene que tomar, que tomar distancias, hay que separarse. Separarse de una historia, de una vida, de unas formas. No mirar hacia atrás, dejar las llaves tiradas, sin esperar que alguien las recoja. A veces no podemos leer algunas cosas, a veces no podemos escribirlas. Otras, no nos aguantamos.

Yo me separé, y me acerqué. Si eso pasó. Me acerque a algo desconocido, un camino sin final, sin horizonte alguno, o mas bien con un horizonte infinito. Detrás, quedo una historia vencida, vieja data, de otras costumbres, otros sabores.

Hay sabores que uno no quiero volver a probar. Hay otros que dejan de gustar. Unos nuevos en cambio, que te conquistan y te hacen desearlos todo el tiempo. El chocolate.

Los tiempos se acaban. Una fecha llega sin dar mas espera, un día cualquiera el tiempo muere, un día cualquiera pasa algo inadvertido, el viento roza tu cara y ante tus ojos hay otro paisaje, otro horizonte.

Me separé. Las cosas no pudieron seguir, no me di cuenta de esa milésima de segundo en el que las cosas llegan a la fecha de vencimiento, y obstinada seguí comiendo. Luego un dolor fuerte de estomago, me hastié, no puedo más… vomite… esperé. Y lo boté todo.

Hay veces en las que uno ve borroso. A veces hayq ue ver entre lioenas, leer entre las gente, poner un filtro... ver a traves de otros ojos.

Quería seguir estando cerca, pero separarse significa tomar una distancia. Solo el tiempo sabrá que caminos se toman, nos dirá cuando una puerta sigue cerrada y un viaje es uno de no retorno. Solo el tiempo, por corto o largo que sea, nos confirma que es hora de seguir caminando.

Pasé la calle rápido, una de tantas. Tengo mas por cruzar. De pronto un puente, saltar al vacío, ir debajo de las calles, volar por los aires. Todavía falta mucho. Solo crucé una calle.

Después entregué unas llaves. Y después las dejaran tiradas el día del vencimiento. Probablemente las devuelva o probablemente estén out of date para ese entonces, y de nada sirvan entonces.

Cuando uno se muda cambia la clave de la chapa. Las llaves pierden utilidad. Uno podría hacer una colección de las llaves out of date, y darse cuenta que aun conserva puertas si cerrar del todo. Mi próximo propósito, recogerlas todas y tirarlas a un vacío, donde ni siquiera el mundo pueda usarlas.

A ver si las puertas se cierran del todo, y puedo seguir cruzando calles.

Mientras las que sirvan se sigan usando, sigan abriendo puertas, se puede seguir caminando. Luego se hacen unas llaves nuevas...

Despues de las llaves y los caminos, las puertas y las fechas de vencimiento, tambien me di cuenta que acercarse demasiado es peligroso.

martes, 11 de marzo de 2008

Despues del dia D

nada, solo un poquito de risa, un poquito de sorpresa, nada mas emocionante....

Solo por los que me acompañaron y siempre me apoyaron.

El dia D

En agosto de 2002 tomé una decisión. Una que cambió mi vida, por supuesto, como las grandes desiciones, que pocas son, porque a veces pareciera que uno fuera yendo por la vida, acomodándose y la verdad, en contravia al salmón. Pero esta vez, el salmón me tomo de su aleta y nade con el.

Hoy 5 años y medio, después pasa algo que supongo y creo que es importante, porque lo siento, pero que solo parece un cliché mas de la vida, como unos 15 o como los 18 o como quizás sean los 30, de pronto el matrimonio y menos mal uno no esta, para el día en que se muera, porque o sino sería lo mismo.

Terminar una etapa, como esta la de la universidad a muchos les da una tremenda alegría. Yo supongo que levantarme por el cartón de la Universidad Nacional de Colombia, me debe dar un poco de alegría, y sospecho que una lágrima o en el mejor de los casos, risa nerviosa. Sin embargo, lo único que siento hoy, la noche antes es un poco de rabia y por tal razón un poco de tristeza.

Y no es la tusa de la salida de la u… esa la pase hace un par de meses y creo estar saliendo viva. Sino, la tristeza de la ausencia, la de un sueño compartido, la de un camino recorrido, sin una mirada, sin una compañía, sin la compañía del que al final es el mejor pana de uno (así al final es eso, resistir en una profesión aunque sea solo académica, y en la vida uno se dedique a millones de cosas menos a eso…) ese que se me fuera, una mañana de un 12 de febrero, ese que me dejo tanta cosas bonitas, que me enseño a ver la vida, a vivirla con la berraquera, pero el mismo que sin que me diera cuenta me dejo, sin haberle aprendido tantas otras. Su recuerdo, esta presente, su ausencia latente y por supuesto, la tristeza en mi corazón siempre.

Así es mi tristeza.


Uno pudiera agradecer muchas cosas… mirar hacia atrás y darse cuenta que el tiempo pasa y mal que bien uno hace las cosas, que ahí va a quedar enmarcado el cartón de la mejor universidad de Colombia (así lo sostengo) porque es la que me dio a mi oportunidades que no hubiera tenido en otra parte. La misma que me hizo entender muchas cosas del mundo, de la gente, del país. Igual pasaron 5 años que dejan muchas huellas, por supuesto. Pocos amigos, que lastima que sean pocos, pero una fortuna que sean reales, mcuhos conocidos que ya no recuerdan el nombre de uno y que probablmente uno tampoco el de ellos. Unos tantos maestros, no por todo el conocimiento que le dejan a uno, sino porque con ellos, uno insistió, no desistió y se lleno de dudas para seguir caminando y buscando las respuestas. Una experiencia que probablemente poco sirve para el mundo real, que le espera a uno, pero si el instinto y la sensibilidad para sortear la soledad, porque es casi lo único que queda cuando uno termina la universidad. Que si antes estuviste solo, hoy, el día que te gradúas, estas solo de verdad y para siempre.

Creo que no me arrepiento de estudiar lo que estudie. A veces, solo a veces, me pregunto para que sirvió. A veces obtengo respuestas, otras solo sigo viviendo. Ser maestra en artes plásticas (porque son artes plásticas?), me puede dar un posición privilegiada, pero también la posición menos ventajosa. Ojala, allá afuera uno pudiera decidir.

Luego confirmo, lo de la lagrima o la risa nerviosa.