Un exceso de bebés. Por eso los bebés prestados son buenos así. Porque apenas lloran uno los devuelve. Sonrisas sin motivo, los bebés sonríen sin motivo. La vida debe parecer bonita desde esas mínimas alturas, una visión granangular de un mundo aparentemente inocente con gente haciendo bobadas para que los bebés sonrían. Luego caminar mientras el shuffle del Ipod ponía bajo su capricho al azar la banda sonora de un caminar al lado del metro, mientras en el parque una fila de niños en sillas de ruedas sonreían mientras el joven les decía, "Hagan así con las manos como si tuvieran hormiguitas" Una sonrisa otra vez, una sonrisa porque me provocó hacer así con las manos para que las hormiguitas se bajaran y los niños sonrieran. Y luego un mercado zombie calculado. Mas tarde cuando todo parecía terminar al color de la noche, cuando los ojos están con ganas de cerrarse, olvidé algo, y luego volví a olvidar. Me pregunto en que planeta ando. Y aun así, el estaba dentro del bus "estadio" de pronto ya yendo a casa mirando los carros hacia atrás y me miraba con su cara de niño, y sus ojos de niño y le saqué la lengua, lo saludé con la mano, le hice malacara, recordé en la R18 dorada, en la parte de atrás haciendo lo mismo, pero yo era entonces niña, como el niño al que yo adulta le hacía caras sonrientes y enojadas, esperando a que como yo de niña me escondiera, o sonriera. El solo me siguió con la mirada, y yo lo seguí por el rabillo, porque tenía que mirar para el frente y seguro el volvía a su casa, y seguro cuando tenga 25 recordará los viajes en bus con su papá, y el bus para el solo, cuando la noche es oscura y sus luces amarillas dan mas sombras y mas figuras para jugar con la imaginación.
Y como le dije a mi amor, hoy fue un día bonito.
2 comentarios:
Definitivamente, como alguien me dijo una vez, la primera frase es casi tan importante como todo el libro. Y ahí me quedé, con una primera frase impactante y una segunda igual y le sigue la tercera y así vamos hasta que concluyo con una sonrisa y volviendo a pensar que me gusta como escribes.
Un abrazo y no dejes las letras (ni la cámara)
arol
Sonreír y cuidar nuestra sonrisa de forma saludable no solo mejora nuestra apariencia, sino que también tiene beneficios significativos para nuestra salud mental y emocional. Una sonrisa genuina puede aliviar el estrés, mejorar el estado de ánimo y fortalecer las conexiones sociales.
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