Solo pensamientos, historias por escribir para que luego no las olvide. O solo para sacarlas de la cabeza...

martes, 27 de octubre de 2009

La cocina


La casa estaba oscura. Me gusta a veces cuando estoy sola en esta casa grande, andar con las luces apagadas y seguir sintiendo el vacío al ritmo de mis pasos.

La cocina de mi casa es como el centro de comandos. Ahí llego cada vez, saludo, descargo, tomo algo. Prendo la TV, me siento un rato. A veces paso de derecho, pero solo a veces. La cocina es donde esta el olor a casa, donde Nena hace las delicias, donde Nena nos da todo su amor, nos espera para contarnos los días que ocurren entre los platos y las vueltas. Cuando era chiquita los butacos eran altos y ahi comiamos los cuatro a las 6 de la tarde. Pasé tardes haciendo tortas de chocolate, chupándome los dedos que untaba con la masa mientras era batida, mientras probaba la harina primero con agua, y luego con huevos y luego con la esencia de vainilla, luego chuparse las paletas de la batidora y esperar el olor del horneado.

Luego buscando recetas para el día de la madre en los libros gordos que compramos en el semáforo, traduciendo ingredientes, mirando la despensa a ver que faltaba para la receta.

Y ahora, cuando estoy a oscuras y sola, me gusta bajar a cocina y sentarme a trabajar en la mesa donde todas esas cosas bonitas pasaron, donde me siento acompañada por el chocolate hirviendo y los panes calentándose.

Y aunque la cocina de mi casa tenga mis 26 años, ya este pasada de moda, el mesón este despintado la cocina de mi casa me gusta mucho.

Nunca la habia visto con la luz apagada. Se ve muy bonita.

2 comentarios:

arolasecas dijo...

Desconstruimos imágenes con un breve cambio y nos permite descubrir un ángulo diferente de aquello que siempre vemos.

¿es la misma cocina del estudio en vivo?

Ana Maria Vallejo dijo...

No Arol, esta es otra cocina.

La del en vivo es donde hago lentejas y caliento el chocolate para trabajar.

Esa es otra historia.

Un abrazo!